El examen de
las mamas es muy importante en las mujeres, especialmente para detectar
precozmente la presencia de un cáncer. Se efectúa mediante la inspección y la
palpación. El examen debe ser prolijo, sin dejar de cuidar el pudor de la
paciente.
Para localizar
las lesiones de la mama, ésta se divide en cuatro cuadrantes mediante dos
líneas virtuales transversales que pasan por el pezón. Casi todo el tejido
glandular se encuentra en el cuadrante superior externo, el cual hacia la axila
se prolonga formando una cola. El drenaje linfático se efectúa principalmente a
la axila, pero también ocurre hacia regiones infraclaviculares y estructuras
profundas del tórax.
La inspección
conviene efectuarla estando la paciente sentada con sus brazos colgando a los
lados, apoyados a cada lado de la cintura o levantados. Se deben observar ambas
mamas en forma simultánea para comparar la simetría de ellas, el aspecto y
orientación de los pezones, posibles deformaciones o retracciones, y si existe
compromiso de la piel.
En la aréola
de las mamas, que es una zona pigmentada que rodea el pezón, se ven unas
prominencias pequeñas que corresponden a glándulas sebáceas (tubérculos de
Montgomery) y algunos folículos pilosos.
En la inspección de las mamas se tiene
que considerar lo siguiente:
- Simetría, calibre y forma.
- Amastia, atelia, politelia y polimas-tia.
- Red venosa visible
- Inversión del pezón.
- Pigmentación de la areola por hormonas del embarazo.
- Ginecomastia uni o bilateral. Inflamación, celulitis, abscesos (tetralogía de Celso).
- Piel en cascara de naranja o de cerdo.
- Implantes de mama.
- Cicatrices.
Palpación de la mama
Con el
paciente acostado con una pequeña almohada o toalla debajo de los hombros, su
brazo elevado y manos debajo de la cabeza cuando se examina la mitad interna de
la mama y con el brazo a lo largo del cuerpo en la mitad externa de la mama.
Se palpa con
las puntas de los dedos haciendo movimientos circulares, cuadrante por
cuadrante cuidadosamente, chequear la temperatura, la turgencia y espesor de la
piel.
También se
puede palpar con las palmas de las manos haciendo movimientos circulares y
pasando ambas palmas sobre la superficie triangular de las mamas buscando nodulaciones
e irregularidades de la piel.
La piel en
cascara de naranja se observa mejor cuando el paciente con las manos en las
crestas iliacas contrae los pectorales o cuando hiperextiende la espalda o se
inclina hacia delante.